Últimamente resulta difícil escribir
Últimamente resulta difícil escribir, ha pasado mucho tiempo desde la última vez que escribí en este blog, el cual, aun sigue en mi memoria. ¿Casualidad? Puede.
Me paro a recordar la de sentimientos que se me han pasado por la cabeza a lo largo de los años y las pocas veces que lo he plasmado en esta web, si lo hubiese escrito todo, ahora mismo tendría algo así como una biblia personal, una biblia personal en el olvido, y es que ya nadie pasea por este blog, por este lugar escondido que un día decidí utilizarlo a modo de desahogo, era agradable escupir al cielo, esa sensación tan agradable de que algún extraño, que por casualidad del destino, se cruzara con mis textos y se parase a leer alguno de esos pensamientos transformado en párrafos difícil de digerir. Era agradable, pero aún más agradable era saber que una persona concreta, me estaba leyendo, una persona que por desgracia, dejo de añadirme comas a mis textos y lo cambio todo por un punto final. Pero bueno, no es correcto ni el momento de hablar de algo que duele en el corazón. Pero, ¿y qué desengaño no lo es? Puede que algún día, me de por hablar de ello, o más bien, por escribirlo. Creo que aun no es el momento, definitivamente no lo es, y es que es muy duro mirar al pasado con el corazón malherido. Dejemoslo ahí.
Últimamente resulta difícil escribir textos personales, textos que hablen sobre lo que realmente siento, y es que la vida es una repetición de diapositivas, y es que, cada vez que me escuece el alma acudo a este blog para expresarme, como un niño cuando se ha caído y corre desconsoladamente a los brazos de su madre. Así, así mismo me siento yo con este blog.
En cierto modo es bonito lo que siento hacia este lugar, hacía una simple web del montón, ¡que digo del montón!, ¡Del mogollón que sobra!. Pero es mi blog mi queridísimo confesionario, escribir aquí es como psicoanalizarme a mi mismo, algo así. A veces ayuda y otras en cambio muero de nostalgia, hasta ahogarme en mi frenética tristeza.
Y bueno, creo que no tengo mucho más que decir, después de desempolvar este lugar, veremos como trascurre este regreso, este grito en medio del desierto. Espero seguir escribiendo, porque al fin y al cabo, es lo único que importa. Escribir.
Me paro a recordar la de sentimientos que se me han pasado por la cabeza a lo largo de los años y las pocas veces que lo he plasmado en esta web, si lo hubiese escrito todo, ahora mismo tendría algo así como una biblia personal, una biblia personal en el olvido, y es que ya nadie pasea por este blog, por este lugar escondido que un día decidí utilizarlo a modo de desahogo, era agradable escupir al cielo, esa sensación tan agradable de que algún extraño, que por casualidad del destino, se cruzara con mis textos y se parase a leer alguno de esos pensamientos transformado en párrafos difícil de digerir. Era agradable, pero aún más agradable era saber que una persona concreta, me estaba leyendo, una persona que por desgracia, dejo de añadirme comas a mis textos y lo cambio todo por un punto final. Pero bueno, no es correcto ni el momento de hablar de algo que duele en el corazón. Pero, ¿y qué desengaño no lo es? Puede que algún día, me de por hablar de ello, o más bien, por escribirlo. Creo que aun no es el momento, definitivamente no lo es, y es que es muy duro mirar al pasado con el corazón malherido. Dejemoslo ahí.
Últimamente resulta difícil escribir textos personales, textos que hablen sobre lo que realmente siento, y es que la vida es una repetición de diapositivas, y es que, cada vez que me escuece el alma acudo a este blog para expresarme, como un niño cuando se ha caído y corre desconsoladamente a los brazos de su madre. Así, así mismo me siento yo con este blog.
En cierto modo es bonito lo que siento hacia este lugar, hacía una simple web del montón, ¡que digo del montón!, ¡Del mogollón que sobra!. Pero es mi blog mi queridísimo confesionario, escribir aquí es como psicoanalizarme a mi mismo, algo así. A veces ayuda y otras en cambio muero de nostalgia, hasta ahogarme en mi frenética tristeza.
Y bueno, creo que no tengo mucho más que decir, después de desempolvar este lugar, veremos como trascurre este regreso, este grito en medio del desierto. Espero seguir escribiendo, porque al fin y al cabo, es lo único que importa. Escribir.
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