El odio es un lastre, la vida es demasiado corta para estar siempre cabreado


En ese mismo mes de febrero sucedería algo que me alegraría haber recuperado y perdido definitivamente para siempre...
Desde lo sucedido con Dolores no supe nada más de ella, hasta que una tarde me encontré con ella y un amigo en común se parase a saludarla,  en ese momento se me vino la idea de volver hablar con ella y ser su amigo lo que en su tiempo no pude... yo tenía claro que ya no sentía ninguna amor por ella, pero que me moría de ganas de ser su amigo! sin pensármelo dos veces al llegar a casa, le mande una invitación de amistad a su Tuenti, diciéndole que quería ser su amigo, ya en que su tiempo no pude, ella me respondió que ya era tarde...
me decepciono su rechazo, pero días después, cuando ya se estaba terminado el día, recibí un mensaje suyo diciéndome que le perdonara por su mala contestación, y que si le encantaría que fuésemos amigos.
esa noche dormí con una sonrisa de oreja a oreja, en ese preciso momento entendí porque la quise tanto en su tiempo.
Poco duraría esa felicidad, ya que terminando el mes de febrero tuve una fuerte discusión con ella, Dolores me culpaba de malos entendidos que yo quizás pude causar en el pasado.. yo le dije que lo sentía pero parece ser que no fue suficiente, yo nunca quise hacer ningún daño ni a ella ni nadie de su alrededor, era de lo mejor que me había pasado nunca sería incapaz de hacer algo que la lastimara, y de sus palabras salieron cosas que no me esperaba y que me dolieron más que cualquier insulto insolente...   
Desde ese momento no volví a saber más de ella, solo basto un: no quiero saber de ti jamás, para cerrar por completo la poca relación que quedaba con ella.
Después de eso me sentía mal por las palabras que uso contra mi por aquella lengua tan larga al decirme cosas que desde mi punto de vista no me merecía, solo me consoló algo en ese instante, la llamada inesperada de Carmela que sin nombrarle jamás a Dolores, le conté lo sucedido y me escucho. A pesar de todo aún me duelen esas palabras y ese momento, en el que firmo una sentencia de hasta nunca después de que se llevara el viento aquel bonito tiempo pasado...                                    

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